Garantice la integridad y fiabilidad de los datos en su aplicación de agua y aguas residuales

Para maximizar el valor de los sistemas de agua y aguas residuales y trabajar la automatización en su beneficio, es importante asegurarse de que los datos son precisos y fiables. La integridad de los datos es más importante en estos entornos que en cualquier otro: puede afectar a la disponibilidad de agua limpia.

Para calibrar la integridad de sus datos, hágase preguntas como las siguientes:

• ¿Cuál es el estado del equipo que proporciona los datos?
• ¿Los instrumentos han estado en el campo durante un tiempo?
• ¿Cuándo fue la última vez que se revisaron los sensores o dispositivos?
• ¿Se limpian y calibran regularmente los sensores que recogen los datos?

En entornos de 24 horas al día, 7 días a la semana, se ejerce una presión constante sobre estos dispositivos; tienen ciclos finitos y están diseñados para durar sólo una cierta cantidad de tiempo. Cuando se producen fallos, es probable que los dispositivos y sensores proporcionen datos erróneos.

Recogida de datos fiables
Una vez que sepa que sus datos son precisos, es el momento de tomar medidas para asegurarse de que los datos no se pierden por el camino debido a la comunicación o a la pérdida de señal. Las conexiones deben ser fiables para garantizar que la información se captura, se almacena y se transporta a la ubicación correcta.

Aunque se habla mucho de los datos en tiempo real, confiar en este tipo de información en las plantas de tratamiento de agua y aguas residuales puede ser arriesgado. Aunque pueden ser valiosos, los datos en tiempo real sólo son utilizables si la conectividad está siempre encendida y funcionando. Cuanto más grande sea una planta, mayor será el número de líneas de comunicación implicadas. La dependencia de los datos en tiempo real supone que cada una de esas líneas a cada activo remoto está siempre abierta, pero pueden no estarlo.

Para resolver este problema, el protocolo DNP3 (Distributed Network Protocol) permite capturar los datos en la fuente y ponerles un sello de fecha y hora para que la información esté disponible aunque no se entregue en tiempo real. A partir de ahí, puede utilizarse y analizarse para mejorar la productividad y la eficiencia, al igual que los datos en tiempo real.

Si el sistema se cae, incluso durante unos segundos, no se tiene una imagen clara de lo que ha ocurrido. Debido a que DNP3 utiliza este sello de fecha y hora, puede volver atrás y mirar los datos desde ese momento; no hay lagunas ni agujeros en la información.

Los datos de DNP3 también pueden priorizarse y clasificarse. Usted puede decidir qué datos son más importantes que otros (clasificando las condiciones de fallo como una prioridad). Por ejemplo: si una bomba no se enciende en el momento adecuado, eso es algo que quiere saber de inmediato. La clasificación de los datos permite seleccionar qué información tiene prioridad y se comunica primero porque es un indicador de un problema. Los demás datos se transmiten detrás de estos para poder analizarlos una vez por hora, una vez al día, una vez a la semana, o lo que sea necesario.